Bloquea dominios registrados hace menos de 30 días. Se sabe que los actores de amenazas favorecen a esos dominios para lanzar campañas maliciosas.
Bloquea dominios que, después de haber estado inactivos durante un tiempo, de repente se vuelven activos. Este comportamiento suele ser un signo de actividad maliciosa.
Bloquea los dominios generados por los algoritmos de generación de dominios (AGD) que se encuentran en varias familias de malware y que pueden usarse como puntos de encuentro con sus servidores de comando y control.
Bloquea los dominios que se hacen pasar por otros dominios abusando del gran conjunto de caracteres disponible con la llegada de los nombres de dominio internacionalizados (IDN) — por ejemplo, reemplazando la letra latina "e" por la letra cirílica "е".
Bloquea dominios registrados por actores maliciosos que se dirigen a usuarios que ingresan incorrectamente la dirección de un sitio web en su navegador, por ejemplo, gooogle.com en lugar de google.com.
Evita que los atacantes tomen el control de tus dispositivos locales a través de Internet bloqueando automáticamente las respuestas de DNS que contienen direcciones IP privadas.
Los servicios de DNS dinámico (o DDNS) permiten a los actores maliciosos configurar rápidamente nombres de host de forma gratuita y sin ninguna validación o verificación de identidad. Si bien rara vez se accede a los nombres de host DDNS legítimos en el uso diario, sus contrapartes maliciosas se usan mucho en campañas de phishing, por ejemplo, paypal‑login.duckdns.org.
Evita el uso no autorizado de tus dispositivos para minar criptomonedas.
Los dominios aparcados son sitios web de una sola página, a menudo cargados de anuncios y sin ningún valor. La monetización de dominios aparcados a veces puede mezclarse con prácticas sospechosas y contenido malicioso.
Bloquea los dominios de nivel superior (TLD) que se sabe que son favorecidos por los actores de amenazas debido a su bajo precio, la ausencia de revisión o la falta de recursos legales.